Edward Scott Kenway, Terminado

Nombre: Edward Scott Kenway
Cuenta: Alistair
Raza: Humano
Sexo: Masculino, Heterosexual
Cargo y Nivel de Poder: Revolucionario, 1
Ocupación: Médico
Obtención por préstamo: Ito Ito no Mi
Descripción física:

Características Faciales: La cara de Edward es estrecha y un tanto puntiaguda en la barbilla, de nariz pequeña. Ojos de tamaño un tanto grandes y de largas pestañas, presentan heterocromía (su ojo izquierdo es de color rojo sangre mientras que el derecho es de color azul celeste).

Cabello: Su cuero cabelludo es de color rubio platino, es largo hasta la mitad de su espalda y lacio aunque algo puntiagudo/pajizo. Un mechón cae sobre su cara ocultando su ojo izquierdo, el resto está peinado hacia atrás formando algunas puntas en esa dirección.

Físico: Su cuerpo es del tipo delgado-aunque-muscular, pues a pesar de no ser muy ancho de hombros su masa muscular está equilibrada y sus músculos, bien definidos. Mide 1.75 metros, pesa 187 lb.

Características especiales: Un tatuaje que representa la cabeza de un león en el centro de su espalda.

Imágenes:



Descripción psicológica:
Edward es, por encima de todo, un humanista, y defiende los derechos de todas las razas como iguales siempre que le es posible. Su alineamiento podría considerarse como ''Legal Bueno'', pero la única ley en la que cree es en la Justicia Moral, el lado opuesto de la moneda que tiene como otra cara la Justicia Absoluta de los Marines. Haría todo lo que estuviese en sus manos por proteger a inocentes e indefensos, pero no dudaría en atacar a alguien que califique de malvado.

Tras la fachada de Revolucionario, se esconde una persona muy protectora hacia sus seres queridos, como su tripulación, camaradas y/o amistades. Generalmente es una persona cálida, alegre y gentil hacia los demás (como referencia, una personalidad semejante a la de Robin con toques de la de Chopper)

Le gusta imitar comportamientos, cosa que hará para pasar el rato y fastidiar a sus compañeros de la tripulación de forma burlona. Otra de sus manías es la de hacer casi todo al revés (escribir al revés como en un espejo, caminar hacia atrás a veces, pararse de manos, comer con la mano no dominante, etc). Es solo una manía, pero su costumbre ha hecho que se le dé bien hacer todo lo que se le ocurra al revés. Su risa característica es ''Nyahahaha''.

Aptitudes:
Hacer las cosas al revés (incluso hablar al revés) Algunos pocos arqueólogos podrían traducir lo que dice, pero a otros que no le conocen esto les parecería como si hablara en poneglyph.

La medicina y su estudio y comprensión.

Imitar el comportamiento de otros.

El parkour (es lo bastante ágil como para moverse entre edificios y callejones, con volteretas y otras maniobras acrobáticas).

Contorsionismo (Su cuerpo, al ser bastante flexible, le permite hacer varias maniobras acrobáticas que requerirían una alta capacidad de contorsionismo, como esquivar un ataque a-la-Matrix dejándose caer hacia atrás sin tocar el suelo, a pura fuerza de piernas y abdomen, o colarse en conductos estrechos.)

Beber/Comer: Edward posee la capacidad estomacal de un almacén industrial y come mucho para la persona estándar. No solo eso, sino que sorprendentemente aguanta muy bien contra el alcohol, el sake no es capaz de tumbarlo a menos que fluya como un río por su garganta.

La música. No es tan bueno como un músico profesional ni puede sacarle partido a su habilidad en combate, pero puede improvisar alguna tonada o canción de cuando en cuando para pasar el tiempo.

Deficiencias:
La cocina (se le da pésimo cocinar, al punto de que su comida sabría de forma semejante a comer una fruta del diablo o incluso comer veneno puro. Otro método de tortura usual de los revolucionarios).

Carpintería: Una vez intentó crear una balsa. Creó una escalera. Se le da extremadamente mal el trabajo manual de carpintería.

Autocontrol: Cuando Edward se sale de control (típicamente cuando los ojos se tornan casi blancos de la ira o el shock), le cuesta mucho no seguir sus instintos y pensar fríamente. Si hay alguien que merezca una paliza, no le importará si es un ''Dios'' o un Dragón Celestial, como mínimo tendrá que ser aguantado por compañeros de tripulación para que no vaya a tratar de dársela.

Espadas: Edward no tiene ni santa idea de cómo usar una espada, es capaz de agarrarla por el filo y tratar de embestir a alguien. Lo cual resulta gracioso, pues sus instrumentos quirúrgicos también son afilados y sin embargo los maneja con maestría.

Historia y lenguajes cifrados: Cuando se topa con uno de estos, es capaz de ponerse a leerlos al revés, y terminar entendiendo menos que antes. No sabe ni chufa de historia o lenguajes cifrados, y sinceramente tampoco le interesan, puesto que de todas formas el pasado quedó en el pasado y los lenguajes cifrados importantes, como el poneglyph, solo traerían consigo destrucción mediante las Armas Ancestrales, y eso no beneficiaría al pueblo.

Extras: Es extremadamente torpe, aunque no lo aparente. Mientras camina normal no pasa nada, pero es muy propenso a caer en trampas, resbalar por acantilados, y similares. Es diferente a su hermana, puesto que esta incluso al caminar normalmente es capaz de tropezar, llevando la torpeza al siguiente nivel, pero aún así es muy torpe.

Le gustan los acertijos, los juegos mentales, crear estrategias en poco tiempo o improvisadas, la gente agradable, la lectura ligera (sobre todo ficción y romance), jugar el papel de líder en un asalto a la CP o Marina, estar en compañía de camaradas, la paz y sacrificarse por otros (siendo capaz de meterse en medio de balas para que otros no la reciban).

Le disgustan la crueldad, todo lo relacionado al gobierno mundial, y verse inferior a un marine o CP en cuanto a poder (verse impotente ante su injusticia)
Sueños o Metas:

-Volverse el Lider Revolucionario, destruir al Gobierno Mundial, en fin, las típicas metas de los Revolucionarios.
-Eliminar la trata de esclavos y a los Tenryubitos.
-Tener una tripulación muy grande y poderosa, pero llevarse bien con todos en ella también.
-Eliminar a la CP.

Historia:

Edward Scott Kenway nace en Saint Reia, hijo de dos revolucionarios de no muy alto rango, Lilly Windhelm y Alexander Kenway. Su infancia fue algo dura en la base revolucionaria, pues sus padres apenas tenían el tiempo para cuidarle y en cambio siempre era una amistad con algo de tiempo libre quien le cuidaba y educaba. Para el quinto cumpleaños del pequeño, sus padres habían muerto en un atentado por parte de la CP, aunque nunca se supo qué división lo había hecho. La amiga de sus padres, Shirley Hummington, entonces no tuvo más remedio que adoptar al crío junto a su hermana, enseñándoles a luchar y defenderse mientras crecían, entrenándolos para ser grandes revolucionarios como sus padres, mártires a la causa.

Al cumplir la mayoría de edad, le dieron el sobrenombre de El León Albino, debido a su ''melena'' de cabello y su vestimenta, muy usualmente de color blanco, su favorito. Además, el seudónimo Alexander se le fue dado en honor a su padre. Su entrenamiento se intensificó, enseñándole a ocultarse correctamente, colarse en sitios estrechos para espiar, moverse acrobática y fluidamente por callejones, escalar edificios y otras estructuras; en fin, este entrenamiento era para que Edward pudiese sustentar sus propias habilidades de combate, no las mejores por cierto, con sigilo, espionaje y agilidad. También se le dio entrenamiento en el arte de la curación y la cirugía, aunque solo aprendió lo básico. Es en esta etapa de su vida que ''Alex'' adquiere su manía de hacer las cosas al revés (cuando se le enseñaba a codificar cartas escribiendo como en un espejo, aunque nunca llegó a entender cómo hacerlo), eventualmente haciendo muchas cosas al revés para entretenerse.

Una vez había terminado su entrenamiento, Edward estaba preparado para alistarse como soldado raso en el ejército. Habiendo pasado toda su vida entrenando sin tener idea de como era el mundo afuera más que la misma Saint Reia, Ed no podía esperar para salir de aventura junto a una pequeña división o solo con su hermana. A pesar de ser apenas un poco más que una persona hecha para ser un revolucionario, sin haber podido escoger su rumbo en la vida, a él no le importaba ya que era una oportunidad única haber nacido entre ellos, pues había aprendido lo malvado y despiadado que puede ser el Gobierno Mundial y se dedicaría a liberar a las islas bajo su control. En un punto de su trabajo como revolucionario, adquiere su fruta del diablo, la Ito Ito no Mi, la cual le permite manipular hilos a voluntad. Aunque sus hilos apenas poseían algún potencial verdadero en combate, ya que no había aprendido a endurecerlos al grado de hilos de acero, había aprendido a usarlos para cerrar heridas a sus aliados y a sí mismo, dándole un giro inesperado y mucho menos bélico a esta habilidad, reputada como una temida y poderosa akuma. Con el tiempo, ya iría aprendiendo a endurecerlos a tal punto y a manipularlos para darle formas diversas o para controlar como marionetas a otros, pero por el momento casi todo su uso era estrictamente médico.

Nombre del personaje: Alucard
Serie/Manga/Videojuego del que Proviene el Pj: Saga Castlevania